9 de diciembre de 2008

EN ATENCIÓN AL DIA INTERNACIONAL DE LA ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER, CELEBRADO EL PASADO 25 DE NOVIEMBRE

Foto por: Andrés Monroy Gómez
El pasado 25 de Noviembre se celebró el día Internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer. El presente artículo es una compilación de algunos fragmentos de los pronunciamientos hechos en diferentes medios de comunicación por defensores de Derechos Humanos, académicos y periodistas profundamente preocupados por la dificil situacion de violencia que enfrentamos las mujeres de Colombia y del mundo.

El Grupo Internacional Derecho & Justicia preocupado también por ésta situación; trabaja desde su línea de acción en asuntos de género en el mejoramiento de las condiciones de vida de las mujeres Colombianas, el respeto de sus Derechos, las posibilidades de acceso al ejercicio de los mismos y el restablecimiento cuando estos han sido vulnerados.

Estamos plenamente convencidos que las sociedades que protejen y garantizan los Derechos de sus mujeres en condiciones de igualdad, respetando y entendiendo siempre su


Mensaje del Director del IIDH en ocasión del Día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer

San José, Costa Rica, 24 de noviembre de 2008.


(...)


En el Día internacional por la eliminación de la violencia contra la mujer, el 25 de noviembre, el IIDH se une a la lucha valerosa por el derecho de las mujeres a una vida libre, sin discriminación ni violencia. En el marco de los “16 días de activismo contra la violencia de género”, el IIDH y su Proyecto CEDAW-Argentina, coordinado por Soledad García Muñoz, llevará adelante, en conjunto con la Corte Suprema de Justicia, la exposición fotográfica-conceptual “Mujeres moviendo derechos”, con la presencia de las ministras de la Corte, Carmen Argibay y Elena Higthon de Nolasco. Asimismo, con la Banca de la Mujer del Senado de la Nación, se realizará el lanzamiento del documental que reseña la estrategia integral de incidencia por la ratificación en Argentina del Protocolo Facultativo de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer; acompañarán la Senadora Marita Perceval y el Senador Rubén Giustiniani.

Las alarmantes dimensiones de la violencia hacia las mujeres a escala mundial, fueron denunciadas explícitamente en diciembre de 1993, cuando la Asamblea General de la ONU aprobó la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La no violencia como exigencia y condición de derechos, se reitera posteriormente en la Conferencia de derechos humanos de 1994 y se repite en numerosos cónclaves internacionales. “La violencia contra las mujeres constituye una violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales… y una manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales entre mujeres y hombres”, así dice el preámbulo del único instrumento internacional específico en la materia, la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Belém do Para).

Desde 2007, la OEA ha dicho que la educación en derechos humanos –desde la primera edad escolar– es un valioso instrumento para la erradicación de la violencia y la construcción de sociedades respetuosas y no discriminatorias, ello asegurará que las niñas de hoy sean las mujeres que mañana ejercen sus derechos.


Roberto Cuéllar M.

Director Ejecutivo




Suprimir la violencia contra las mujeres

Por: Rodrigo Uprimny


LA CELEBRACIÓN ESTE 25 DE NOVIEMBRE del “Día internacional para la erradicación de todas las formas de violencia contra las mujeres” debería recordarnos la gravedad de este fenómeno en América Latina y específicamente en Colombia.(...)

Esta violencia doméstica contra las mujeres no se limita a los sectores sociales pobres y sin formación académica, como a veces se cree. Ella se presenta en todos los estratos: en Colombia, en los hogares con educación superior, el porcentaje de mujeres agredidas por su pareja llega al 22%.

Pero la violencia contra las mujeres no es sólo doméstica; ocurre en otras esferas. Los actores del conflicto armado colombiano han recurrido sistemáticamente a formas de violencia sexual contra las mujeres, como ya lo había señalado la Relatora de Naciones Unidas de violencia contra la mujer en su informe de 2002 sobre Colombia y lo reiteró el reciente Auto 092 de 2008 de la Corte Constitucional. Y sin embargo casi ninguna de las versiones libres de los “paras” ha mencionado esas atrocidades.
Tan grave como la extensión de esta violencia es que ésta tiende a ser banalizada e incluso invisibilizada, por la persistencia de inaceptables estereotipos culturales. La agresión contra las mujeres, que es una clara violación a los Derechos Humanos, es vista por muchos como “natural”, por una cultura discriminatoria y machista, que sigue siendo muy extendida. (...)

La impunidad de estos crímenes agrava el panorama: la mayor parte de los casos no son investigados y algunas decisiones judiciales trivializan la violencia contra las mujeres. (...)




En Colombia se denuncian al menos 120 casos de maltrato a mujeres por día.

Al menos 120 denuncias sobre maltrato a las mujeres por parte de su pareja se presentan cada día en Colombia ante las autoridades de medicina forense, denunciaron organizaciones defensoras de los derechos humanos.

La cifra, que es inferior a la real por el miedo de las víctimas a denunciar, se presentó en Bogotá con motivo del lanzamiento de un el programa contra la violencia de género con motivo del Día Internacional de No Violencia contra las Mujeres, que se celebra mañana.

Entretanto, en el país se presentan cada dos horas tres casos de violencia sexual y el 60 por ciento de las víctimas son niñas o adolescentes de alrededor de 14 años de edad, añadieron.(...)


Agregó que el plan está dirigido a lograr uno de los ocho ODM, un conjunto de metas a cumplir en 2015 en materia de reducción de la pobreza, educación, salud materna, salud sexual y reproductiva, reducción de la mortalidad infantil; combate al VIH/sida, malaria y dengue; y sostenibilidad del ambiente y equidad de género.(...)



Mujeres invisibles

Por Manuel Velandia
“Mi marido no me quiere, ya ni siquiera me pega. Desde que tengo el sida ya no le importo para nada… antes por lo menos peleaba conmigo, me maltrataba, pero ahora es como si yo no existiera, como si fuera invisible. Él viene, come, se cambia y vuelve a salir”.

Esta frase que me dijo una mujer mujer santandereana de 27 años, en la investigación colombiana sobre el sida denominada “María Esperanza: una historia de amor”, me recuerda que la violencia contra las mujeres es un hecho cotidiano para muchas de ellas, tan presente en sus vidas que cuando no la tienen, les hace falta.

Cuando pensamos en mujeres y derechos, generalmente lo hacemos teniendo en mente a mujeres visibles como ciertas liderezas políticas, feministas reconocidas, imágenes públicas, pero olvidamos que en nuestros espacios más cotidianos hay mujeres comunes y corrientes, mujeres casi invisibles que no salen en los medios sino cuando ya es demasiado tarde porque ya se han perpetuado hacia ellas las formas mas violentas de agresión como los son las mujeres asesinadas por sus parejas sexuales, las mujeres desplazadas por la guerra, las mujeres victimas del conflicto armado, las mujeres campesinas cuyas voces se ignoran, cuyos gritos no escuchamos, u otras mujeres citadinas, cuyas “rebeldías” nos parecen poco importantes y cuyas efímeras vidas ni siquiera cuentan plenamente para sus hijos. (...)

No nos permitamos asumir y aceptar que existe cierto tipo de agresiones “naturales”, porque el hecho de que son aceptadas social y culturalmente como una manera de relacionarse entre hombres y mujeres. (...)

Lo único realmente natural es que somos diferentes, pero entre los hombres y entre las mujeres, unos/as a otras/os igualmente somos diferentes porque somos únicos, irrepetibles, tenemos una historia y un desarrollo igualmente particulares. En nuestra unicidad está nuestra grandeza y en el reconocimiento de dicha posibilidad en el otro y en la otro, el germen de una convivencia realmente solidaria y democrática.

!Que las mujeres sean visisbles todos los dias¡





PROTOCOLO DE LA FEDERACIÓN INTERNACIONAL DE PERIODISTAS PARA EL CUBRIMIENTO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES


1. Identificar la violencia contra las mujeres con exactitud,apoyándose en la definición aprobada en 1993 por Naciones Unidas sobre la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres.



2. Utilizar un lenguaje preciso y no estereotipado. Ejemplos: Una violación o asalto sexual no deben ser calificados como actividad sexual habitual, y el tráfico de mujeres no se debe confundir con la prostitución.



3. Evitar el uso de la palabra 'víctima' durante la entrevista o en la información final. El uso de la expresión puede ser perjudicial. El término que mejor recoge la realidad de la mujer que ha sufrido la violencia es 'sobreviviente'.


No use un lenguaje que sugiera que la sobreviviente es culpable de la agresión o de alguna manera provocó el ataque.


4. Usar estadísticas y antecedentes para situar el lugar delincidente dentro del contexto de violencia de la comunidad o conflicto armado.Proporcione a los lectores/audiencia el panorama completo. (...)


Imagen tomada de Mural-Centro de la cuidad de Bogota/Colombia

4 de diciembre de 2008

NACE EL PROYECTO "DAR VIDA"


El Doctor Jorge Ramírez; presidente de la Fundación Colombiana de Parejas Infertiles FUNCOPI, el Doctor Elkin Lucena; gestor del Centro Colombiano de Fertilidad y Esterilidad CECOLFES y la Doctora Ana María López; directora del GRUPO INTERNACIONAL DERECHO & JUSTICIA; como grupo defensor de Derechos Humanos trabajamos desde hace varios meses en el estudio de una iniciativa social de carácter académico y cientifico-jurídica que estará a cargo exclusivamente de los profesionales del Grupo Internacional; tendiente a obtener la protección de los Derechos Reproductivos de parejas con problemas de fertilidad; como Derechos Humanos.

El proyecto se ha estructurado sobre la base de la protección al Derecho a tener una familia y la correlación de las técnicas de reproducción asistida con la perspectiva de género y los derechos humanos fundamentalmente en américa latina.

Si bien, en cabeza de estas de parejas se encuentra la titularidad de los Derechos de creciente protección Constitucional, no existen para ellas mecanismos efectivos de protección o de garantía para el ejercicio de estos. Los excesivos costos en los que se incurren para la realización de las diferentes técnicas de reproducción asistida obligan a las parejas en un alto porcentaje, a desistir en la busqueda de materializar su Derecho a tener una familia y a obtener satisfacción en todos los elementos integradores del concepto de Salud Sexual y Reproductiva (SSR)

La iniciativa busca obtener la protección a tales Derechos para las parejas en cabeza de las cuales se ha constituido la violación a estos bien sea a corto plazo; obteniendo por via judicial una orden que comprometa al sistema de seguridad Social de la Nación y así mismo a las Entidades Promotoras de Salud con el cubrimiento de los tratamientos y técnicas de reproducción asistida requeridos, o a mediano plazo; visibilizando la problemática ante los encargados de regular nuevamente el Plan Obligatorio de Salud para finales del año 2009, de acuerdo con la orden impartida por la Corte Constitucional, e incluso hacer evidente la necesidad de la existencia de regulación a nivel normativo sobre este tema que representa una vulneración sistematica de los derechos Reproductivos y fundamentales de las parejas.


Las condiciones y calidad de vida de la niñez, bastante deficientes en un país como Colombia, se verán ampliamente beneficiadas del exito que el proyecto represente; en la concepción de niños que harán parte de familias expectantes y decididas a proveer condiciones dignas para su crecimiento y desarrollo.

El Grupo Internacional Derecho & Justicia se enorgullece de encabezar esta iniciativa en cuanto a la labor jurídica y de hacerse parte de este proyecto que busca la protección de los derechos humanos y fundamentales de las mujeres, las parejas, las familias, los niños y la sociedad en si misma que se verá beneficiada con la constitución de nuevas y solidas familias como piedra angular de su composición.